Hace casi ocho años paso todos los días por la puerta del Sheraton desde y hacia la estación Retiro.
Hasta hace poco, la parada trucha -porque la oficial comienza a metros de donde está la real con el palo tradicional- estaba copada por una sola empresa de radio taxi que ahora no recuerdo el nombre (hay tantas) pero que imaginé que estaba entongada con el hotel.
Hoy vi que Omar Viviani, secretario del gremio de peones de taxis, encabezó una protesta en el tradicional alojamiento porque al parecer el hotel cambió de empresa de radio taxis cansados de las truchadas a las que sometían a los pasajeros y turistas que todos imaginamos como ciertas y más todavía.
Es un secreto a voces que Viviani es dueño de varias empresas de radio taxi y que incluso digitó la entrega de licencias de radios (para taxis obvio).
Por la presencia de él y la virulencia con la que movilizó al gremio sospecho que la empresa que hasta ahora copaba con métodos mafiosos la parada del Sheraton era suya.
Tan nivel de impudicia tiene este amigo de Moyano y por qué no del propio Kirchner que amenaza con una huelga de todo el gremio para que le restituyan el negocio.
Sería bueno encontrar reflejado esto en los diarios de este viernes.
No vi tanto alboroto del gremio cuando se destaparon las escandalosas mafias de taxis de aeroparque y los shoppings.
ResponderEliminarIgual, es sano que los taxistas protesten, y cuanto más violento mejor. Así la proxima vez que un tachero me diga algo así como "¿por qué estos piqueteros no van a un protestódromo?" yo les pueda contestar "hacen lo mismo que vos en el Sheraton".
Los "militantes" del gremio de Viviani estuvieron en los incidentes de San Vicente.
ResponderEliminarEl empresario de taxis Viviani, quien en sus ratos libres como capitalista oficia de lider sindical de sus empleados, estuvo trepado a la cureña con los restos de Perón gritando y agitando los brazos como un desaforado mientars vociferaba la marcha peronista.
O sea, se creía un poquito más centro de atención que el extinto fundador del justicialismo.