miércoles, 19 de septiembre de 2007

Ganamos, perdemos, siempre perdemos

El paso de Alejandro Wall por la editorial Perfil terminó de la peor manera. No tengo palabras. Sí, una profunda tristeza.

¿Quién detiene a empresas como Perfil que se defecan en los derechos de los trabajadores, derechos que no los consagra un sindicato, una asamblea de laburantes ni un burócrata del Ministerio sino leyes?

¿Quién se animará a quejarse en esa editorial de presumidos y carneros?

¿Quién será el próximo de esta reestructuración?

11 comentarios:

  1. Yo creo que en vez de quejarse de que el gobierno no pone publicidad oficial en Perfil habría que hacer una campaña para que los privados tampoco pongan publicidan en los pasquines del nazi de Fontevecchia y sus parlanchínes Gallo, Zunino (¿dónde quedaron tus días de combativo del PC y tus trabajos de periodista del cooperativismo?), González, etc, etc. jejejeje
    Una tremenda cagada lo de Alejandro, y sobre todo, nuestra falta de respuestas ante estos atropellos.
    Espero que la Utpba pague caro esta traición.
    Un abrazo para los auténtico laburantes de Perfil y chiflen ante cualquier necesidad. Allí estaremos.

    ResponderEliminar
  2. Los que laburamos alguna vez con Alejandro Wall conocemos su enorme capacidad profesional y humana. No creo que nadie se anime a decir lo contrario. Espero que vuelva a encontrar su lugar pronto porque en los medios hace falta gente así y no basuras incapaces que es lo que es la mayoría. Que lo hayan rajado habla de que en Perfil entienden poco de periodistas.

    ResponderEliminar
  3. Después de lo que pasó con Ale Wall y con Eliaschev (hijo) me cuesta creer que las cosas vayan a mejorar para los periodistas en general y para los que trabajan en Perfil en particular.

    ResponderEliminar
  4. Primer post en que miro comentarios y no están ni holden ni clandestina...serán pareja?

    ResponderEliminar
  5. Clandestina y yo vivimos en mundos irreconciliables.
    Diría Lupita Ferrer, "esa mujer no es para ti, Miguel Alfonso"

    ResponderEliminar
  6. Sinceramente creí q el final sería otro. Respeto y admiro la entereza y convicciones de Alejandro y de quienes lo acompañaron en el reclamo de lo q es justo por legítimo derecho.
    Yo no pensaría quién puede ser el próximo, sino cómo evitar urgente q exista un próximo.
    Y q este recuerdo q nos mandan de q pueden pulverizarnos los deseos hasta de un plumazo, no paralice a nadie. Ni Alejandro ni el resto ni nadie lo merecen.

    Holden... creo q lo importante es q vivimos, no?

    ASNOnimo de 11:46, apurate q llegás tarde a barrerles el piso y lustrarles los zapatos.

    ResponderEliminar
  7. A pesar de los derechos que tienen los trabajadores, Ale se cago en algunos codigos y eso para un periodista es inadmisible. Los chicos que lo seguian no solo no tienen idea de lo que es ser periodista, sino que tampoco saben lo que estan defendiendo.
    La objetividad es la señal principal que un periodista debe tener; y por aca...no veo nada de eso.
    Abran los ojos...periodistas!!!

    ResponderEliminar
  8. Ramón, estoy de acuerdo con q a veces la vehemencia, las vivencias personales y las pasiones nos juegan en contra al momento de diferenciar las etapas de un proceso como es el q se dió y, supongo, continuará dándose en Perfil.

    De todas formas, creo q eso también tiene q tener un espacio de charla, un espacio para compartir angustias y zozobras dentro de la lucha, sencillamente xq somos seres q sentimos, q nos sabemos vulnerables, q tememos cuando tenemos familia q alimentar y no sabemos cómo haremos si quedamos en la calle, etc., etc.

    O sea, nos integramos o no a una lucha con todo ese bagaje, es parte, nos constituye y no creo q se resuelva sólo con un "platémonos duro ante la patronal explotadora" y punto. No estoy diciendo: hagamos terapia de grupo ni mucho menos, pero tampoco neguemos esa realidad q a veces en soledad es mucho más difícil de afrontar para salir adelante. Entiendo q eso forma parte de la solidaridad de compañeros en lucha (y en lo cotidiano también), no creo q seamos sólo fuerza de trabajo. Y creo q estamos bastante perdidos si no podemos sostenernos y contenernos entre nosotros.

    Te pido disculpas por lo caótico de la respuesta, quisiera ser más clara y ahondar más en algunos puntos, así q si te parece q se justifica continuar, te agradeceré q me escribas al email q ves en mi nick y la seguimos.

    Gracias y un saludo, Ramón

    ResponderEliminar
  9. Hola Clandestina: después te mando un mail si querés, pero entré acá y digo: suscribo 100% lo que decís. ¿En donde estarían, para vos, las diferencias entre lo que ambos hemos escrito? ¿Será una cuestión de estilos? Mi texto, ahora que vuelvo a leerlo, puede que suene desapacionado, hiperacional, pero básicamente apunta, palabras más o menos, a sopesar las cosas para que los compañeros no decaigan, no bajen su moral. Hablé de "cuidar su moral", es decir su estado de ánimo. El escepciticismo, o una visión derrotista como se expresó en algunos post, quizá no el tuyo, que era sólo básicamente triste, no son útiles para tu reclamo de "tener un espacio de charla, un espacio para compartir angustias y zozobras dentro de la lucha".

    Saludos, R

    ResponderEliminar
  10. Ah, una más... ¿Alguien entendió el post de "solita"? juro, sin mala leche, que no entendí nada...

    ResponderEliminar
  11. Ramón, gracias por responder. Es muy posible q haya interpretado mal, todo es posible.

    Si querés mandar mail no hay problema, pero no te distraigas x esto ahora, hacelo después de q pasen las elecciones.

    En cuanto a lo de Solyta me quedó reclara la intención, tanto de difamar y faltar el respeto a Alejandro Wall como de subestimar a quienes trabajaban con él. Es una especie de Sosa con polleras (bah... y no se), q bardea sin dar argumentos xq no los tiene. DE CUARTA.

    Que resulte lo mejor para ustedes. Un abrazo.

    ResponderEliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.